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La enfermería de salud mental y la importancia de las enfermeras de salud mental
La atención a la salud mental es una parte de clara relevancia dentro de la atención a la salud de las personas. Desde la antigüedad, donde los trastornos mentales se explicaban mayoritariamente relacionándolos con eventos demoniacos o sobrenaturales, hasta épocas más cercanas donde figuras como Philippe Pinel y John B. Watson comienzan a crear lo que hoy en día entendemos como psiquiatría, la percepción y tratamiento de las enfermedades mentales ha evolucionado significativamente.
En España, el gran avance en la atención a la salud mental la constituyó la reforma psiquiátrica llevada a cabo en 1985, a través de la cual se inició la llamada ‘desinstitucionalización’. Este proceso transformó los grandes manicomios y hospitales psiquiátricos, sustituyéndolos por otros recursos más humanizados, integrando la atención a la salud mental dentro de los servicios de salud generales y fomentando la atención comunitaria.
Actualmente, existen numerosos diagnósticos dentro de los trastornos mentales y la prevalencia de personas que los sufren es cada vez mayor. Esa variabilidad en el tipo de paciente que se atiende, tanto por los diagnósticos como por el amplio abanico de edades, subraya la importancia de que aquellos que prestan atención en estos servicios tengan la formación necesaria.
La especialidad de enfermería de salud mental tal y como hoy la conocemos nació en España en el año 1998. En la actualidad, esta formación se constituye por dos años de formación teórico-práctica, accesible a través del examen EIR que se realiza a nivel nacional. Durante estos dos años, las profesionales se familiarizan con los diferentes recursos dentro de la atención a la salud mental, incluyendo hospitalización, centros de tipo residencial y recursos comunitarios.
En la ciudad de Teruel, la atención a la salud mental se articula a través de diversos recursos especializados. Contamos con una unidad de salud mental comunitaria para adultos y otra de infantil, ambas ubicadas en el Centro de Salud del Ensanche. También en este centro, y de reciente creación, se encuentra la Unidad de Adicciones. Otro recurso importante es el Centro de Rehabilitación Psicosocial San Juan de Dios, que ocupa el lugar del antiguo hospital psiquiátrico y está formado por tres unidades diferenciadas: una de media estancia, otra de larga estancia y psicogeriatría. Finalmente, la ciudad cuenta con una unidad de hospitalización de corta estancia en el Hospital Obispo Polanco.
La capacidad de las enfermeras de salud mental para establecer relaciones terapéuticas con los pacientes es un aspecto crucial de su labor. Estas relaciones fomentan la confianza y el respeto mutuo, esenciales para proporcionar un cuidado efectivo. La enfermería de salud mental se asienta en los pilares de la empatía, comprensión y en las habilidades de comunicación para entender y responder a las necesidades de sus pacientes. Esta conexión ayuda a los pacientes a sentirse seguros y valorados, lo cual es esencial para su recuperación.
La importancia de las enfermeras de salud mental también se refleja en su rol en la evaluación y diagnóstico inicial de los pacientes. Al trabajar en estrecha colaboración con psiquiatras, psicólogos y otros profesionales de la salud, las enfermeras de salud mental contribuyen a identificar los síntomas de trastornos mentales y a desarrollar planes de tratamiento personalizados. Su formación y experiencia les permiten observar signos y síntomas que podrían pasar desapercibidos para otros profesionales, lo que es crucial para un diagnóstico temprano y una intervención oportuna.
Además, las enfermeras de salud mental juegan un papel vital en la administración de tratamientos y terapias. Ya sea en un hospital, una clínica o en la comunidad, estas enfermeras son responsables de monitorizar el progreso del paciente, ajustar los planes de tratamiento según sea necesario y proporcionar educación sobre medicamentos y terapias. Su labor incluye la administración de tratamientos, la supervisión de terapias grupales e individuales y el apoyo en crisis. La capacidad de manejar situaciones de emergencia y de brindar una atención continua y coherente es esencial para la estabilización y el progreso de los pacientes.
La educación y el empoderamiento del paciente son otros componentes clave. Los profesionales se esfuerzan por proporcionar a los pacientes y sus familias la información necesaria para comprender sus condiciones y cómo manejarlas. A través de la educación, las enfermeras ayudan a desestigmatizar las enfermedades mentales, promoviendo una mayor aceptación y comprensión en la comunidad. Además, fomentan la autonomía del paciente al enseñarles habilidades de afrontamiento y estrategias para mantener su salud mental y física a largo plazo.
En un contexto global, la importancia de las enfermeras de salud mental se vuelve aún más evidente. Con el aumento de las tasas de enfermedades mentales en todo el mundo, la demanda de servicios de salud mental está creciendo. Las enfermeras de salud mental están en una posición única para responder a esta necesidad, proporcionando atención accesible y asequible a diversas poblaciones. Además, su capacidad para trabajar en una variedad de entornos, desde hospitales hasta centros comunitarios y domicilios, les permite llegar a personas que de otro modo podrían no tener acceso a los servicios de salud mental.
En resumen, las enfermeras de salud mental son esenciales para el sistema de salud. Su capacidad para establecer relaciones terapéuticas, realizar evaluaciones precisas, administrar tratamientos efectivos, educar a los pacientes y trabajar en la prevención de enfermedades mentales las convierte en pilares fundamentales de la atención de salud mental. La dedicación y el compromiso de estas profesionales contribuyen significativamente al bienestar mental de individuos y comunidades, destacando la necesidad continua de apoyar y fortalecer la enfermería en todo el mundo.
Paula Inés Castellot Aparicio
Enfermera especialista de Salud Mental. Máster en Trastornos Postraumático por la UNED.
Enfermera de salud mental en la unidad de corta estancia de Psiquiatría del Hospital Obispo Polanco.